Voy a cometer una indiscreción. Sé que me perdonará porqué ahora esto es una realidad. Hace unos meses, en una tarde de café, Miguel me mostró el proyecto de la Ruta Arqueológica Minera. Con todas las precauciones de un Top Secret me explicó a detalle. Apasionado, enérgico, con un discurso que convence, platicamos cerca de dos horas. Yo lo escuchaba y observaba, ocasionalmente lo interrumpía para comentarle algo o para preguntarle. Cuando me fui de ahí, mi perspectiva sobre el valor del patrimonio industrial que tenemos en la ciudad cambió radicalmente. No sólo por saber de su existencia, sino por el gran potencial que esto significaba.
Luego vinieron reuniones, visitas al IMIP, algunas visitas a la UAEH con parte del grupo de investigación “Arquitectura y Ciudad”. Generosamente Ana y Miguel compartieron parte de ésta gran idea con mis alumnos con la intención de involucrarnos en un futuro en el desarrollo y, principalmente, en la promoción y defensa del mismo.
El día de ayer se presentó oficialmente la Ruta arqueológica minera de Pachuca, una iniciativa del gobierno municipal que promueven (y me atrevo a decir diseñan) Ana y Miguel. Ana, sin miedo, con ese discurso de frente que la caracteriza dice como preámbulo: “estamos ante un proyecto (calle Hidalgo) que privilegia al peatón y reduce el uso del automóvil”.
Si, es de las pocas funcionarias que pasan del discurso (sin miedo) al proyecto. Qué orgullo.
“Este es un proyecto de ciudad…
que nace del centro histórico” (Ana Daría Torres)
Conozco del trabajo de Ana y Miguel, y estoy confiado en que su pasión por la arquitectura, por la ciudad, darán resultados tremendos. Veo con un gusto enorme que jóvenes arquitectos tomen las riendas y sean la punta de lanza para proyectos de ésta magnitud.
En 2016, el Senado de la República aprobó declarar el 8 de noviembre como el día del urbanista mexicano, por la necesidad de “reconocer la labor de los urbanistas en México, quienes forjan un hábitat más agradable y funcional” indicando que la “Carta Mundial por el Derecho a la Ciudad establece el compromiso de las ciudades a desarrollar una planificación que garantice el equilibrio entre el desarrollo urbano y la protección del patrimonio natural, histórico, arquitectónico, cultural y artístico.» Esta es una muy buena forma de conmemorarlo.
Estamos viviendo momentos apasionantes en materia de arquitectura y ciudad. Y eso me emociona de sobre manera. Se vienen cosas muy interesantes, debemos estar preparados para actuar.
Deja tu comentario